Hola amigos y seguidores, tras un largo periplo de ausencia, retomo este blog compartiendoos esta poética entrada a modo de microrrelato.
Teniendo en cuenta que el tiempo nos limita a la mayoría a la hora de devolver tanto visitas como comentarios y releyendo vuestras opiniones al respecto, finalmente he decidido que si devolveré todas las visitas, además de incluir en vuestros blogs algunas impresiones sobre lo que me comentais, en el caso de que no sean "huellas de compromiso". Por tanto no teneis obligación alguna de comentarme y menos de actuar por simple cortesía.
Ya sabeis que yo tengo por costumbre leer antes de comentar y si lo hago extenso es porque suelo implicarme totalmente con lo que escribís.
Voy a seros muy sincera, a riesgo de que pueda resultaros una lunática, porque me gustaría dejaros muy claro que por experiencia propia y ajena, sucede que una gran parte de contertulios -no sólo me refiero a mi blog- sin ser muy conscientes de ello -quiero imaginarme- cuando alguien "abre el fuego", el resto tiende a reiterar dicha opinión en mil modos diferentes, lo cual acaba desvirtuando la comprensión del texto y por consiguiente motiva a responder de forma automática, algo que detesto, por tanto, a partir de ahora, no incluiré respuestas a vuestros comentarios en este blog, para que el lector se centre en la lectura del texto.
Ya sabeis que yo tengo por costumbre leer antes de comentar y si lo hago extenso es porque suelo implicarme totalmente con lo que escribís.
Voy a seros muy sincera, a riesgo de que pueda resultaros una lunática, porque me gustaría dejaros muy claro que por experiencia propia y ajena, sucede que una gran parte de contertulios -no sólo me refiero a mi blog- sin ser muy conscientes de ello -quiero imaginarme- cuando alguien "abre el fuego", el resto tiende a reiterar dicha opinión en mil modos diferentes, lo cual acaba desvirtuando la comprensión del texto y por consiguiente motiva a responder de forma automática, algo que detesto, por tanto, a partir de ahora, no incluiré respuestas a vuestros comentarios en este blog, para que el lector se centre en la lectura del texto.
Muchas gracias a todos y hasta pronto.
- microrrelato inspirado en la ilustración de Ina Hristova que veis arriba -
Se agita la campana de su falda al roce de las frágiles margaritas y los tímidos tréboles, cuando se escucha el penetrante silbido del viento que recorre las trincheras de los lánguidos sauces y en ese preciso instante el bostezo de la alondra que cruza la llanura la obliga a girarse.
Ella sabiéndose cautiva de sus sueños, fue trazando líneas rojas en cada esquina del poblado procurando no ser vista por algunos vecinos que la lanzaban exabruptos criticando sus modales libertinos y aquella juguetona costumbre de levantarse la falda al pasar por la puerta de sus amantes.
Más, caprichoso el destino, quiso burlar su suerte y la condujo hasta un estrecho callejón donde una jauría de lobos fue despojándola de su mullida prenda, hasta acabar blandiendo aquel botín por todo el pueblo. Entonces llegó la alondra asediándolos a picotazos hasta arrebatarles su trofeo para devolvérselo a su dueña: "La Hija del Viento".
Estrella Amaranto © Todos los derechos reservados
Bem vinda de volta com seus mágicos e envolventes relatos, companheira Estrella Amaranto. Que siga na atividade de forma constante. Eu também tenho que recuperar meu antigo ânimo e voltar a atualizar meu blog. Não posso me perder por causa dos descaminhos da política.
ResponderEliminarBeijos e abraços.
Hola mi entrañable amiga Estrella Amaranto, tanto tiempo sin saludarnos, y ahora, es un placer poder saludarte. Y volverte a leer. Se dice que no hay nada que escapé a nuestras buenas o malas intenciones, tarde o temprano, se ajustan cuentas y más cuando se vanagloria de nuestro egocentrismo.
ResponderEliminarUn abrazo a la distancia y tengas excelente fin de semana.
Hace poco tiempo leí que la mitad de los hombres cree que la ropa de la mujer influye en el acoso callejero. Además un portecentaje bastante elevado justifica los manoseos en los transportes públicos por cómo se visten las mujeres. Y lo peor es que el estudio fue realizado sobre una muestra de varones de 18 años,...
ResponderEliminarEsa percepción de "cortesía", "broma" "o sólo una molestia trivial" es en realidad una una limitación a la libertad y movilidad de las mujeres en los espacios públicos.
Desde mi punto de vista vivimos una cultura que es muy permisiva cuando se trata de asaltos sexules de todas las categorias. Me ha encantado tu micro!
Bienvenida!
Bienvenida de Nuevo Amaranto. Es un placer poder leer tus relatos, micros y todo lo que buenamente nos regales. Un micro donde de da rienda suelta a la mujer que provoca y a los ojos que la miran de otra manera. No debería ser así que las personas piense lo que no deben por sus manera de vestir. Un abrazo.
ResponderEliminarHola Estrella, como te dije hace un rato es una sorpresa muy grata tenerte de vuelta.
ResponderEliminarLindo tu micro, las descripciones son hermosamente perceptibles al leerte, y ese final fue encantador, ingeniosa la forma como insertaste el titulo ya al final. Por cierto me encantó esa libertad, ¿Quien sino "La Hija del Viento" para ser autenticamente libre?
Abrazos amiga.
Un poético microrrelato el tuyo Estrella. Parece que su destino estaba escrito.
ResponderEliminarUna alegría verte de nuevo.
Abrazo, amiga!
Hola, Estrella. Qué buena noticia es que hayas vuelto, esta vez sin apuros y sin obligaciones de devolver visitas. Es un placer, como siempre, leer tus cosas. Has comenzado con un micro de mucha belleza. Te mando un saludo muy grande.
ResponderEliminarAriel
Buenos días, Estrella.
ResponderEliminarHa sido toda una sorpresa reencontrarte y leer tu hermoso micro.
Seguramente no recordarás mi nombre, pero yo no olvidé el tuyo porque, cuando aterricé en las redes y descubrí las comunidades, me adentré, muy perdida, en "Escribiendo que es gerundio", de Francisco Moroz y tú fuiste la primera persona que me dio la bienvenida y me tendió la mano. No podía ser de otra manera, tu nombre es portador de luz.
Por aquí sigo, haciendo lo que puedo.
Entiendo tu decisión.
Norte, a muchos hombres sí que les influye la ropa que lleva la mujer y justifican sus actos de esa manera. Son los que tienen la mente calenturienta y enfermiza. Por suerte no todos son así.
Un abrazo muy fuerte, amiga y mis mejores deseos.
¡Hola, Estrella! Bueno, una gozada poder leerte de nuevo. Un micro que nos habla de libertad. En este caso el de esa hija del viento, pero en realidad puede extrapolarse a otros ámbitos. Nuestra especie puede dividirse en dos clases: los que iluminan y los que ensombrecen; entre los que proponen y los que se aprovechan de aquellos, como alimañas.
ResponderEliminarLa hija del viento trajo luz al mundo, y esa jauría quiso apagarla. Pero al final hace falta poco para que la oscuridad desaparezca: una cerilla o, en este caso, una alondra.
Un fuerte abrazo!!
Bienvenida Estrella. Me alegro de verte por estos pagos.
ResponderEliminarPrecioso relato, con mucho para pensar.
Un beso.
Hola Estrella! Me alegra enormemente tu vuelta. Es todo un placer leerte. No me importa que no devuelvas las visitas lo importante para mí es que sigas escribiendo y compartiendo tus letras.
ResponderEliminarUn besazo enorme de bienvenida!!!🌹🌹🌷😘😘😘
Hola Estrella, bienvenida de nuevo.
ResponderEliminarInteresantes tus letras que hacen reflexionar sobre esa necesidad de castigar al diferente pero afortunadamente la alondra ayudó a que no se apagara la luz.
Besos
Me encanta tu manera de expresar algo tangible con un lenguaje poético.
ResponderEliminarMe ha parecido fantástico.
Preciosa manera de volver al mundo del blog, estoy encantada de volver a disfrutar de tu narrativa tan buena.
Bienvenida.
Un beso.
Hola Estrella!me encanta leerte y con eso nos conformamos. Bello micro relato que habla de tantas cosas. Placer poder saludarte.abrazosbuhos.
ResponderEliminarMe alegra saber de ti mi querida Estrella. Y que vuelvas a retomar este blog y con ellos nos vuelvas hacer disfrutar de tus letras es algo muy bello para mi. Tu prosa es genial.
ResponderEliminarUn fuerte abrazo amiga!!
Encantada con tu vuelta, Estrella, y de acuerdo con tu reflexión inicial que aplaudo. Por mi parte, siempre me ha encantado leerte y estoy encantada de que vuelvas a escribir relatos, poesía, micros o lo que quieras porque los voy a leer todos.
ResponderEliminarCon respecto a "La Hija del Viento", supongo que muchas veces hay que pagar un peaje cruel por vivir en sociedad. Todo es contar con la asistencia de alondra.
Un abrazo!!!
Un muy buen comienzo de "temporada", Estrella. Me ha encantado este micro, por su belleza poética y por su esencia.
ResponderEliminarTe agradezco que hayas sido tan clara y rotunda en lo relativo a los comentarios y sus respuestas. No hay nada mejor que dejar las cosas diáfanas desde un buen inicio, jeje. No debe existir ningún tipo de obligación al respecto, del mismo modo que yo ni nadie debe sentirme obligado a comentar un texto solo para quedar bien con su autor/a.
Un beso.
Hola, Estrella, y bienvenida de nuevo después de esta larga ausencia que yo misma compartí durante más de un año. Pensaba tomarme un descanso durante el verano y se me fue de las manos jajaja. Bueno, el caso es que ya estamos aquí de nuevo las dos.
ResponderEliminarRespecto a la forma en que te vas a organizar a partir de ahora, la respeto completamente aunque debo confesar que participar con comentarios en un blog en el que no voy a recibir respuesta me desmotiva un poco a la hora de dejar dichos comentarios (aunque siga leyendo y disfrutando). Yo también he tenido que replantearme "estrategias" a mi vuelta para sacar el máximo provecho a mi tiempo y que, como dices, el blog y lo que conlleva no se conviertan en un fastidio antes que en un disfrute :)
Tu poético micro me ha gustado mucho, me ha parecido muy evocativo. Realmente hay que ser valiente para ser auténtico y fiel a uno mismo; está claro que te expones al castigo de los que no te comprenden o te encuentran diferente. Suerte tuvo tu prota de contar en este caso con alondra :))
¡¡Un beso y feliz tarde de letras!!
Hola, Estrella. Qué bien que estés de vuelta! Un relato muy poético para un tema durísimo. Me ha encantado.
ResponderEliminarHola, Estrella! Me alegra mucho tu vuelta, como te dije en otro post.
ResponderEliminarComparto contigo esa necesidad de cuidar los espacios de tiempo porque a mi también me faltan.
Este relato me plantea una duda... porque la protagonista se muestra tan libre que parecedesafiar a los del pueblo. Esos lobos los imagino humanos en realidad. Son los mismos agraviados por la fresca mujer. Sin embargo aparece la alondra como una metáfora de alguien que vuela y tiene un punto de vista distinto. Quizas la alondra represente el mismo espíritu de esa mujer, así me gustaría imaginarlo, para que ella misma pueda afrontar las consecuencias de sus decisiones.
Un abrazo
Quiero agradeceros vuestras muestras de cariño y atención con la lectura, queridos compañeros:
ResponderEliminarJOSE EUGENIO GUIMARAES - EL BAILE DEL NORTE - MAMEN PIRIZ GARCÍA - I.HAROLINA PAYANO T - FEDERICO RIVOLTA - R. ARIEL - ANA PALACIOS - DAVID RUBIO SÁNCHEZ - ROSA BERROS CANURIA - MARINA - CONXITA C. - KIRKE BUSCAPINA - BUHOEVANESCENTE - ROSANA MARTÍ - EL MUNDO CON ELLA - JOSEP Mº PANADÉS - HOLA, ME LLAMO JULIO DAVID - JULIA C. CAMBIL - MARTA NAVARRO - MIRNA GENNARO
Recibir mis mejores deseos para un buen inicio de semana y muchos abrazos.